Un día en el camino, bajo la lluvia y esperando un bus del cual no teníamos la certeza de su existencia. De entre el grupo de gente que se cubría bajo el zinc de un negocio, una señora de aproximadamente 60 años nos vio extrañada preguntando con su mirada que hacíamos ahí parados con nuestras mochilas. Le preguntamos si estábamos por la ruta correcta, pero ella hablado al mismo tiempo dijo, -¿qué se siente ser aventureros?-, se me iluminó el rostro a pesar de unas cuántas gotas de lluvia y dije “lo máximo”-, ella nos miró sonriendo tímidamente comentando que íbamos bien, que solo esperemos un poco más. Su bus pasó enseguida y levantando la mano se fue despidiendo. Abracé a Gaby, mientras comentábamos entre risas “Somos aventureros”.
Este fragmento es el que más disfruto contar, resume perfectamente estos tres años de Cultura Mochilera. Donde hemos dado un salto entre los viajes de “confort” a recorrer “viviendo la aventura”. Conversando con la gente y caminando largas distancias para encontrar un bus que nos acerque al próximo poblado. Gracias ha ello hemos llegado a lugares espectaculares pero poco conocidos, cada uno con sus características únicas en gastronomía, edificios, museos y especialmente la gente. –Sí, la gente- los ecuatorianos somos lo máximo, alegres y sinceros un poco melancólicos pero con muchas peculiaridades que transforma a cada lugar en un mundo totalmente distinto y por descubrir.
Les contaré en secreto a voces, nuestro máximo placer es fotografiar paisajes, estamos tentados por la montaña y el senderismo. Sabemos que pocas personas no se atreven a caminar por ciertos lugares con sus cámaras pero nos arriesgamos por ese loco sentido de conseguir “la foto”. Para que me entiendan es como el amor a primera vista. Primero te quedas helado y después corres por conseguir el mejor encuadre. Cuándo te vas sueñas con volver, hasta que otra ilusión aparece.
Pero no nos quedamos solo ahí, disfrutamos introduciendo el bichito de la aventura. Compartiendo imágenes, videos, frases y datos claves junto a un par de relatos de cómo lo vivimos. Así cuándo llegues a tu destino no te olvides de recorrerlos y te pierdas lo menos posible durante el camino y de vivencias.
Es un placer compartir con todos ustedes, muy pronto subiremos más relatos, bitácoras y un sueño más. Llevarles a una salida. Mientras tanto...
GRACIAS TOTALES.
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